Los Phoenix Suns renuncian al futuro miembro del Salón de la Fama Chris Paul.
Se dice que el jugador de 38 años está explorando múltiples opciones este verano, que incluyen intercambios o volver a firmar un contrato más barato antes de la fecha límite del 28 de junio.
Liberarlo antes de fin de mes significa que la organización sólo tendrá que desembolsar 15 millones de dólares (12 millones de libras) garantizados por la superestrella en lugar de los 30,8 millones de dólares (24,7 millones de libras) que le quedan en su contrato para la temporada 2023-23 de la NBA.
Paul, que ha pasado las tres últimas temporadas en Phoenix, ha tenido problemas en los playoffs, y se perdió los cuatro últimos partidos del equipo por una lesión en la ingle.
Si los Suns no renuncian a él, es posible que opten por asumir el cap hit e intentar volver a contratar a Paul con una tarifa anual más baja.
También cabe señalar que, como presidente de la Asociación de Jugadores, negoció una norma que le beneficiaba específicamente a él y a otros agentes libres veteranos y les permitía firmar contratos significativamente mayores.
Es posible que tenga la mirada fija en un destino lejos de Arizona, sobre todo porque fuentes de la liga han confirmado que el futuro miembro del Salón de la Fama está interesado en jugar muchos años más.
Aunque Paul ha promediado 13,9 puntos, el promedio más bajo de su carrera, y ha tirado por debajo del 45,0% en tiros de campo, sigue siendo capaz de ser una pieza clave para un equipo campeón.
Los Lakers de Los Ángeles son los favoritos en las apuestas para hacerse con sus servicios. Su rival, Los Ángeles Clippers, también quiere reencontrarse con su ex escolta.
En la lista también figuran los Philadelphia 76ers, los Milwaukee Bucks y los Boston Celtics, todos ellos equipos que quieren asegurarse un anillo en la próxima campaña.