Charles Leclerc ganó este domingo en el Gran Premio de Bahréin que se disputó en el circuito de Sakhir y fue la vuelta del triunfo de Ferrari en la Fórmula 1 luego de dos años y medio. El monegasco lideró el 1-2 para la Scuderia delante del español Carlos Sainz. El podio lo completó Lewis Hamilton (Mercedes) a pesar de su falta de grip. Mientras que el último campeón mundial, en neerlandés Max Verstappen (Red Bull), abandonó por fallas en la dirección hidráulica.
Leclerc, de 24 años, hizo una buena partida y mantuvo la primera posición sobre Verstappen. Detrás de ambos se ubica la otra Ferrari conducida por el español Carlos Sainz. Mientras que Lewis Hamilton (Mercedes) dio cuenta de Sergio “Checo” Pérez (Red Bull). quien también perdió ante Kevin Magnussen, cuyo Haas también es motorizado por Ferrari y se muestra muy competitivo. Sin embargo, el danés luego habría tenido algunas fallas con los frenos y cayó dos lugares.
Con dos segundos de ventaja de Leclerc sobre Verstappen, la lucha la brindaron los dos Alfa Romero del finlandés Valtteri Bottas y el chino Guanyu Zhou, contra el Williams del tailandés Alexander Albon. Mientras que en el décimo giro Checo Pérez superó a Hamilton y se ubicó cuarto.
Más allá de que los impulsores de Mercedes no estén fuertes como los de Ferrari y Honda (proveedor de Red Bull y Alpha Tauri), la escudería germana no dispuso usar el juego nuevo de gomas blandas (todos largaron con ese compuesto menos los dos McLaren) para la carrera y apostó a ello en la clasificación. En la undécima vuelta Hamilton ingresó a los boxes para hacer su primera parada y le colocaron gomas duras. Al volver a pista, con el caucho frío, se pasó en la primera curva y fue superado por Guanyu Zhou y el inglés quedó 12°. Sin embargo, en el giro siguiente el Séptuple dejó atrás al chino.
En la vuelta 15 Verstappen ingresó a cambiar sus gomas y puso el compuesto blando nuevo con el objetivo de poder ganar adherencia y ser más rápido. En la ronda siguiente Leclerc hizo su parada y también puso el compuesto blando. El neerlandés redujo la diferencia y quedó a menos de un segundo lo que le permitió usar el DRS y en el giro 17 superó a Leclerc en la primera curva. Pero luego entre las curvas 3 y 4 Leclerc recuperó el mando. En la vuelta siguiente el duelo se repitió: Max dio cuenta de Charles, que luego volvió al primer puesto.
Al cumplirse el giro 19°, Verstappen volvió a superar a Leclerc, pero el campeón mundial bloqueó y se pasó por lo que el corredor de Ferrari otra vez tomó la posición de privilegio. En la vuelta 20 Max ya no estuvo en zona de DRS (a menos de un segundo) y no pudo intentar otro sobrepaso.
El desgaste de las gomas de Verstappen tras su bloqueada le hizo perder terreno y Leclerc le sacó 2,9 segundos en la vuelta 24. El de Red Bull no pudo volver a estar en la zona de DRS y con ello el ferrarista consiguió afirmarse en la punta. “Los neumáticos están muertos”, disparó por radio Verstappen a su equipo en el giro 28, cuando Hamilton hizo otra parada en la que perdió tiempo y el británico quedó octavo. Lewis puso otra vez gomas duras e igual su equipo le pidió que no los exigiera demasiado.
Dos vueltas más tarde Verstappen hizo su segunda detención y puso el compuesto medio y esa fue su estrategia para terminar la carrera. En el siguiente giro Leclerc cumplió con su segunda parada y le colocaron gomas medias y volvió a pista adelante de Verstappen.
En esa instancia la competencia fue liderada por Sainz y Checo Pérez como escolta. Leclerc fue el líder virtual ya que aún faltaban las detenciones del español y del mexicano, quienes ingresaron a boxes en la vuelta 34.
Leclerc recuperó el liderazgo en pista y a falta de 22 vueltas el monegasco le sacó a Verstappen dos segundos de diferencia, que se amplió a 3,6 segundos en el giro 41. Con un buen ritmo en su F1-75, el monegasco pudo mantenerse en la vanguardia. Tres rondas más tarde Max efectuó su tercera detención y le pusieron gomas blandas. Un giro más tarde Hamilton hizo su tercera parada.
Sin embargo, el dramatismo llegó con la rotura del motor del Alpha Tauri de Pierre Gasly y para retirar el coche ingresó el auto de seguridad y con ello las diferencias desaparecieron. Leclerc aprovechó a poner gomas blandas.
Pero luego del relanzamiento, Verstappen, en lugar de intentar el sobrepaso a Leclerc, debió defenderse de Sainz que estuvo a punto de superarlo al llegar a la primera curva. Los 3,1 segundos en las últimas tres vueltas entre Charles y Max definieron la carrera en Sakhir.
Los problemas hidráulicos le impidieron a Verstappen seguir en carrera y abandonó a falta de dos giros. Mientras que en las últimas dos vueltas Hamilton se le acercó a Pérez (con pérdida de potencia en el motor) y lucharon por el tercer lugar. La presión del inglés generó un trompo del mexicano.
Leclerc logró un contundente triunfo y lideró un histórico 1-2 para Ferrari que volvió al triunfo luego de dos años y medio. El podio lo completó Hamilton.
Ferrari no comenzaba ganando desde Australia 2018 con Sebastian Vettel y desde 2004 que la Scuderia no arrancaba con un 1-2, en el año del último título de Michael Schumacher. Los tifosis tienen con qué volver a ilusionarse otra vez.