Brooklyn Nets es líder de la Conferencia Este con 14-6. Visto así, desde una perspectiva puramente matemática y práctica, podríamos decir que los chicos de Steve Nash van por el camino correcto, y puede que no nos equivoquemos. Sin embargo, las sensaciones, sobre todo ante rivales de entidad, nos hacen echar un poco el freno.
A nadie escapa que el único objetivo de un equipo con Kevin Durant y James Harden, es el anillo. Con ello sueñan en Brooklyn, y justo por eso cuando miden fuerzas ante alguno de los mejores conjuntos de la NBA, y más si es del Oeste, se analiza con lupa qué son capaces de hacer. Pues bien, por ahora solo acumulan disgustos en este sentido.
De los equipos que se encuentran en estos momentos en puestos de playoffs en la Conferencia Oeste, los Nets solo se han enfrentado a Golden State Warriors y Phoenix Suns. El resultado en ambos casos ha sido idéntico: no han tenido opciones de ganar. Tras el golpe ante los de San Francisco, Nash dijo que estos están a un nivel superior. Después del varapalo frente a los de Arizona ha ocurrido lo mismo.
“Somos un equipo que aún se está formando, que aún está tratando de encontrar una identidad.“Este equipo (Phoenix) tiene una identidad clara, una comprensión clara de lo que están tratando de hacer ofensiva y defensivamente, algo en lo que nosotros todavía estamos en las primeras etapas. Cuando nos quedamos bastantes puntos atrás, dejamos de hacer nuestro juego. Esa es una señal de equipo nuevo, de un equipo que aún intenta entenderse y encontrar algo de claridad e identidad”, expresa en declaraciones recogidas por Brian Lewis de New York Post.
No podemos quitar la razón al head coach de Brooklyn. Nash vive su segundo año como técnico del equipo, tienen bastantes jugadores nuevos y además cargan con la situación de Kyrie Irving. Quizás son condicionantes suficientes para tener tropiezos de envergadura en noviembre; eso sí, cuando llegue marzo, abril… los playoffs… tales explicaciones caerán. A Brooklyn se le exigirá rendir acorde a las expectativas.