Las declaraciones de Mbappé sobre su futuro han puesto en alerta a todos los equipos interesados en él. El PSG ha acelerado su maquinaria para que renueve, pero por ahora, el jugador prefiere esperar y sigue dando largas. Eso sí, ha dejado claro que si se queda, desea un contrato largo.
El Real Madrid, por su parte, está buscando fórmulas para pagar el fichaje y su sueldo. Las estimaciones que hay en el club blanco es que el PSG va a pedir unos 160 millones de euros por él y a eso hay que sumar lo que cobra Mbappé, 21 millones de euros netos por temporada.
Ahora mismo, el club blanco no puede pagar eso. En una economía de guerra por el coronavirus y con la remodelación del estadio, el Real Madrid mira cada céntimo que gasta. Además, gastarse esa millonada mientras pide reducciones salariales a jugadores y directivos, sería crear un gran malestar en el club.
Los planes del Madrid para ir a por Mbappé es vender a dos jugadores de peso. Uno de ellos sería Vinicius por el que el PSG lleva tiempo preguntando y que podría entrar en la operación. Pero aún queda otro y tal y como está el mercado, es complicado que otro club pague una gran cantidad de dinero mientras siga la actual situación económica.
La esperanza del Madrid es que Mbappé siga como hasta ahora, sin renovar y acabe su contrato en 2022, por lo que se iría gratis. Esa es la situación ideal para el equipo blanco, pero el jugador tiene prisa por definir su futuro y ahí no parece que entre esperar al Real Madrid. De eso se puede aprovechar el Liverpool que quiere sí o sí a Mbappé.
Mbappé pide garantías
Las dudas de Mbappé para seguir o irse del PSG son básicamente deportivas. Según la prensa francesa, el jugador le pide al club de París garantías de que va a formar un equipo ganador, no en Francia, si no en la Champions.
El atractivo del Real Madrid y la Champions es algo que le gusta a Mbappé y más con Zidane en el banquillo, pero el jugador no es ciego y está viendo cómo está ahora mismo el club blanco.