El primer bombazo que se da después de concluida la atípica temporada de la NBA de este 2020, lo ha propiciado la escuadra de Phoenix Suns.
Chris Paul, que pertenecía al Thunder de Oklahoma, fue traspasado en un mega cambio que involucró a Kelly Oubre, Ricky Rubio, Ty Jerome, Jalen Lecque y la ronda del draft 2022.
Los Suns también reciben junto a Paul al alero Abder Nadel.
Es fácil entender el movimiento desde ambas perspectivas. Oklahoma City está iniciando un proceso de plena reconstrucción, apostando por el largo plazo y valorando mucho más los picks y jugadores jóvenes, que a los veteranos que puedan ayudarlos en el presente. Es por eso que Paul, que a sus 35 años, ya no encajaba en la franquicia. Como así también dejarán ir al italiano Danilo Gallinari en la Agencia Libre y traspasarán al alemán Dennis Schroder a Los Angeles Lakers. Y a no sorprenderse si también mueven a Steven Adams o alguno de los jugadores que recibirán vía trades (Rubio, Oubre o Danny Green). Reconfiguración total.
Phoenix, por su lado, suma a un base de enorme vigencia a su media-cancha, para formar una dupla extraordinaria con Devin Booker. CP3 se encargó de demostrar en la 2019-2020 que sigue siendo uno de los jugadores más determinantes de la competencia liderando al Thunder a los Playoffs, con un promedio de 17,6 puntos, 6,7 asistencias y 5 rebotes, que lo dejó en el Segundo Quinteto Ideal de la liga.
Los Suns tuvieron una 2019-2020, con mucho mejor final (8-0 en Disney) que desarrollo general y más allá de que habían mostrado una clara mejoría desde la llegada de Ricky Rubio, necesitaban un salto de calidad para poder aspirar a más: con la configuración que tenían, era difícil imaginarlos peleando en el Oeste y ni siquiera hubieran sido favoritos para clasificar a Playoffs. Después de todo, se trata de un equipo que aún con ese 8-0, acabó la temporada anterior con una marca pobre de 34 victorias y 39 derrotas. Hasta el reinicio, apenas registraban un 26-39.
