El Bayern Munich tiene un plazo hasta mayo para decidir si ejerce la opción de compra que firmó con el FC Barcelona por Philippe Coutinho, lo cual no parece muy probable, por lo que el brasileño regresaría a la disciplina del club azulgrana al término de esta temporada. La información, publicada este miércoles por el diario Bild, no fue valorada desde el Camp Nou, donde una fuente ya aseguró la última semana a ESPN Deportes que el Barça “no ha tratado” todavía el asunto.
Los dos clubes acordaron en agosto de 2019 la cesión del futbolista brasileño durante una temporada, por un precio de 8,5 millones de euros, haciéndose cargo el Bayern del salario del jugador (alrededor de 20 millones brutos) y reservándose para la primavera de 2020 una opción de compra, no obligatoria, cifrada en 120 millones.
El rendimiento de Coutinho en el club germano, transcurrida la primera mitad del curso, no ha alcanzado las exigencias marcadas por sus dirigentes, que entenderían fuera de mercado hacer frente a ese pago, por más que, de acuerdo a la información de Bild, cuenta con el apoyo de sus compañeros, satisfechos con su aportación al equipo.
Presente en 23 de los 24 partidos jugados por el Bayern desde que se oficializó su llegada, el brasileño, titular en 17 de ellos, solamente ha completado 7 encuentros, sumando 1.518 minutos de los 2.070 disputados y marcando 7 goles, destacando un hat-trick frente al Werder Bremen en diciembre y añadiendo también 7 asistencias. Aunque su rendimiento, tras la llegada al banquillo de Hand-Dieter Flick en lugar de Niko Kovac a principios de noviembre, ha ido en crecimiento, el diario alemán afirma que en los despachos del club se descarta hacer efectiva su opción de compra.
PROBLEMA A LA VISTA
En caso de confirmarse la decisión del Bayern respecto a no fichar a Coutinho al acabar la temporada representaría un problema para el Barcelona, que debería reintegrarlo a la plantilla a pesar de no ser valorado, de entrada, por el área deportiva y más aún por cuanto sigue ocupando plaza de extracomunitario.
Siendo el fichaje más caro de la historia del club azulgrana, que pagó en enero de 2018 al Liverpool 120 millones de euros a los que sumó otros 15 desembolsados en concepto de variables, el contrato del crack brasileño se prolonga hasta junio de 2023 y se entiende que la intención del Barcelona será encontrarle una salida en el mercado de verano, teniendo en cuenta que su traspaso debería acercarse a los 80 millones de euros para no computar pérdidas.