El Nápoles está imponiendo un ritmo de crucero en lo que va de campaña en la Serie A. Bajo la dirección de un Antonio Conte que es un estratega sensacional, la entidad partenopea ha presentado su candidatura para reinar en Italia -ya lo hizo en 2023-. Aun así, son conscientes de la exigencia del calendario de un torneo donde deberán imponerse a colosos de la magnitud de Juventus de Turín, AC Milan o Inter de Milán.
Precisamente, coincidiendo con la jornada de este miércoles, era el turno del combinado nerazzurro. Un flamante campeón transalpino que, a buen seguro, hará lo indecible con la ambición de revalidar su corona a lo largo de este curso. Una misión que no será sencilla, aunque, con permiso del Nápoles, parte con la vitola de favorito porque disfruta de una plantilla de muchos quilates que dirige Simone Inzaghi a la perfección.
Por lo que respecta a su contienda, se había desplazado hasta el Estadio Carlo Castellani para poner a prueba la resistencia del Empoli. Matteo Darmian vería portería, pero la diana sería invalidada vía VAR.
De todos modos, los locales se quedarían en inferioridad numérica por la expulsión de Saba Goglichidze a la media hora de juego. Una ocasión que aprovecharía Davide Frattesi para imponer su ley con un doblete, junto con el zarpazo de un Lautaro Martínez que sellaría la victoria del Inter.