Kristoffer Ajer, en un contraataque del Manchester City, a campo abierto y tras 70 minutos de aguantar el asedio, se fue al suelo. Se resbaló, perdió el equilibrio y dejó que Erling Haaland avanzara como un transatlántico hasta la meta del Brentford y certificara la victoria de los Citizens (1-0).
El noruego se desquitó del desastroso partido contra el Chelsea, en el que disparó 10 veces sin acierto, y, pese a que no completó un gran partido tampoco ante el Brentford, su solitario gol sirvió para evitar el segundo tropiezo consecutivo y devolver a los ‘Sky Blues’ a la caza del Liverpool.
Se relamieron durante más de 70 minutos Jürgen Klopp y Mikel Arteta pensando en un empate del City en casa ante un sorprendente Brentford que, pese a recibir cuatro de los ‘Reds’ en casa el sábado, consiguió achicar las ocasiones del City y maniatarlos hasta que el resbalón de Ajer los condenó.
Los de Thomas Frank le ganaron los dos duelos al City la temporada pasada y ya les hicieron sufrir de lo lindo hace dos semanas, cuando Martin Flekken, con 12 paradas, desesperó a un equipo que necesitó un ‘hat-trick’ de Phil Foden para desequilibrar la balanza.
Esta vez el asedio fue menor, excepto durante un tramo en la primera mitad en la que Bernardo Silva, de cabeza, Manuel Akanji, con un disparo a la escuadra, y Oscar Bobb, con un remate tras amago que sacó en la línea de gol Ben Mee, tuvieron el 1-0.
No encontró el camino del gol el City, mientras que el Brentford cabalgó a la contra, pero los intentos de Frank Oyenka y Yoane Wissa quedaron en nada ante Ederson. Con el minutero achuchando al City, que de no ganar perdería la opción de depender de sí mismo para ganar la Premier, aunque quede un mundo aún, necesitó de un milagro en forma de resbalón para que esto no acabara en drama.