Marketa Vondrousova se ha convertido en la primera jugadora no cabeza de serie en ganar el título individual femenino de Wimbledon, mientras Ons Jabeur sigue esperando un grande.
Vondrousova, de 24 años, ocupa el puesto 42 del mundo tras perderse seis meses de la temporada pasada por una lesión de muñeca.
Pero la checa manejó los nervios de la ocasión mejor que Jabeur, subcampeona en 2022, para ganar la final del sábado por 6-4 y 6-4.
Jabeur, sexta cabeza de serie, de 28 años, ha perdido las tres finales importantes que ha disputado y lloró al final.
Vondrousova, que el año pasado acudió a Wimbledon como aficionada con una escayola tras una operación de muñeca, se desplomó de espaldas al asimilar la magnitud de lo que había logrado.
“No sé lo que está pasando, es una sensación increíble”, declaró Vondrousova, que venció a cinco cabezas de serie para alzarse con el premio Venus Rosewater Dish.
Tras compartir un caluroso abrazo con Jabeur en la red, se arrodilló de nuevo sobre la hierba y pareció al borde de las lágrimas mientras recibía la aclamación del público de la Pista Central.
Después, como es tradición, subió al palco de jugadores para abrazar a su equipo y a su familia, incluido su marido Stepan, que había llegado a Londres para ver la final tras quedarse en Praga cuidando de su gato.
Por el contrario, Jabeur parecía desconsolada, sentada en su silla con la cabeza gacha.
“Esto es muy, muy duro. Es la derrota más dolorosa de mi carrera”, declaró Jabeur, que aspiraba a convertirse en la primera mujer africana o árabe en ganar un título individual de Grand Slam.