Brittney Griner tiene la intención de jugar al baloncesto esta temporada con las Phoenix Mercury. Así se desprende de un comunicado publicado el viernes en Instagram, el primero desde que fue liberada de una prisión rusa.
A su llegada a Estados Unidos tras 10 meses entre rejas en Rusia, la estrella de la WNBA fue evaluada médicamente en la base Fort Sam Houston de San Antonio, donde se ejercitó por primera vez y fue directa a hacer un mate mientras su futuro baloncestístico seguía siendo una incógnita.
“Agradezco el tiempo y la atención para asegurarse de que estaba bien y equipada con las herramientas para este nuevo viaje”, escribió Griner.
“También quiero dejar una cosa muy clara: tengo la intención de jugar al baloncesto para el Phoenix Mercury de la WNBA esta temporada, y al hacerlo, espero poder decir ‘gracias’ a aquellos de ustedes que abogaron, escribieron y postearon por mí en persona pronto”.
Griner fue detenida en febrero en un aeropuerto del área de Moscú por posesión de cartuchos para vapear que contenían aceite de hachís, una sustancia ilegal en Rusia. Se declaró culpable en julio y fue condenada a nueve años de prisión el 7 de agosto. Apeló la sentencia, que le fue denegada en octubre.
Estados Unidos canjeó a la estrella de la WNBA por el traficante de armas ruso Viktor Bout el 8 de diciembre.
“Me siento tan bien de estar en casa. Los últimos 10 meses han sido una batalla en todo momento”, escribió Griner. “He cavado hondo para mantener mi fe y ha sido el amor de tantos de vosotros lo que me ha ayudado a seguir adelante. Desde el fondo de mi corazón, gracias a todos por vuestra ayuda”.
