Francia se vio presionada hasta el final por Marruecos, la selección comodín del Mundial, antes de que los defensores del título sellaran su pase a la final del domingo contra Argentina.
La primera selección africana en alcanzar una semifinal de la Copa Mundial se negó a doblegarse a pesar de sufrir los primeros contratiempos de perder por lesión a su defensa clave Nayef Aguerd, que había sido incluido en la alineación inicial, y de ir por detrás en el marcador con un gol de Theo Hernández en el minuto cinco.
Francia, a pesar de todo el esfuerzo y el espíritu de Marruecos, fue más certera, y el suplente Kolo Muani se aseguró de que defenderán su corona contra Argentina y Lionel Messi el domingo en el estadio de Lusail, al desviar el disparo de Kylian Mbappe a 11 minutos del final.
Marruecos también perdió por lesión a Romain Saiss antes del descanso, pero, alentado por su fanaticada, estuvo a punto de empatar, sobre todo con un remate de cabeza de Jawad El Yamiq que detuvo el poste y el guardameta francés Hugo Lloris.
Francia, con un destacado Ibrahima Konate, defensa del Liverpool, mantuvo la compostura en el caldeado ambiente del estadio Al Bayt y dispuso de sus propias ocasiones, con un disparo al poste de Olivier Giroud en la primera parte.
Los hombres de Didier Deschamps siempre amenazaron al contragolpe, y así lo demostraron cuando Muani, al acecho, acabó por quebrar la resistencia marroquí en los últimos compases.
